El término mobbing hace referencia al acoso psicológico que se presenta en las relaciones laborales. Es un comportamiento en el cual una persona o un grupo ejerce violencia en contra de otra, de forma sistemática.
El mobbing se manifiesta a través de tratos hostiles que buscan intimidar a la víctima, aislarlo y afectar su productividad y salud. Es ejercida por el empleador o trabajadores, que suele(n) tener un cargo más alto en la escala jerárquica, que utiliza este poder como medio de presión sobre el afectado.
Otra manifestación de mobbing es la sobrecarga laboral, menosprecio de la labor y el trabajo realizado, ataques verbales y físicos, hablar mal de la persona, aislarlo del grupo y reuniones o no tomarlo en cuenta en las decisiones de la empresa.
El trabajo es un deber y un derecho, que permite el bienestar social y personal de cada individuo. Ante esto, el laburante no solo tiene la opción a un puesto de trabajo, también a que las condiciones del mismo respeten otros principios básicos como ser humano, y así también, a cumplir con lo estipulado en el escrito.
El trabajo es uno de los espacios más importantes para el desarrollo de la relaciones interpersonales, pero las personas que sufren este tipo de violencia, suelen verse afectadas en su vida personal, dañando su estilo de vida.
El contrato de trabajo debe garantizar los medios y condiciones que protejan la vida y salud de sus trabajadores, por parte del empleador, mediante protocolos que eviten situaciones de acoso laboral.
Algunos consejos que pueden aportar a la sana convivencia laboral son los siguientes:
- Capacitar a los trabajadores sobre las conductas que incentivan el mobbing
- Crear los canales de comunicación adecuados y reuniones periódicas
- Generar y trabajar por un ambiente laboral de respeto, en donde el intercambio de ideas sea beneficioso
