La tecnología ha aportado numerosos beneficios a la sociedad actual, creando herramientas que facilitan nuestra vida cotidiana. Entre estos avances, han surgido aplicaciones como BRAVE UP!, la cual ha sido de gran ayuda para las comunidades escolares a nivel mundial.
Precisamente, BRAVE UP! nació pensando en los jóvenes, adaptándose a los tiempos modernos con una aplicación interactiva, que busca comunicar y detectar casos tempranos de bullying y ciberacoso dentro de los colegios, potenciando la idea de hacer comunidad y del trabajo en equipo, entre todos los actores que conforman un establecimiento educacional.
El modo “BRAVE UP!”
Entre las múltiples funciones con las que cuenta la aplicación, se encuentra el modo BRAVE UP!, que permite detectar casos complejos de bullying o ciberacoso antes de que se vuelvan más graves, y solucionarlos en tiempo récord junto al equipo de convivencia escolar de los establecimientos.
Dentro de este canal de comunicación, los alumnos o testigos pueden denunciar, tanto de forma anónima como ingresando sus datos, un caso de violencia escolar.
¿Existe alguna ley que luche contra la violencia escolar en Chile?
Efectivamente, desde 2011 la ley 20.536 es la encargada de abordar la violencia escolar y sancionar toda acción de bullying, dentro o fuera de un establecimiento escolar, ya sea producido por una persona o un colectivo.
La normativa tipifica que todos los recintos escolares deberán contar con un Encargado de Convivencia Escolar, el cual a su vez deberá trabajar en un Reglamento Interno, un Plan de Gestión y un Protocolo de Actuación frente a situaciones de violencia escolar.
Sin embargo, las sanciones para quienes incurran en casos de acoso escolar no las efectúa la ley, sino que deben ser empleadas por la institución. La normativa sugiere sanciones, que van desde medidas pedagógicas hasta la cancelación de matrícula, dependiendo de la gravedad del hecho.
La tecnología… ¿Aparece?
Ningún artículo menciona o hace referencia al apoyo tecnológico que aportan los softwares modernos, pese a la eficacia que han demostrado las aplicaciones para detectar tempranamente casos de acoso escolar y a la confianza que los jóvenes depositan en las nuevas plataformas.
Un punto débil, por decir lo menos, dejando en evidencia que la ley está más pensada para el mundo adulto, con terminología y procesos acordes con su lenguaje y hábitos.
¡OJO! No toda agresión es bullying o acoso escolar
Pese a que se acostumbra a informar que cualquier agresión es acoso, esta debe cumplir ciertas características, como, por ejemplo:
- Que el hecho sea reiterado en el tiempo.
- Que la agresión o forma de violencia por un (unos) par(es) como lo son los compañeros u otros que tengan igualdad de roles.
- Que exista abuso de poder de una de las partes respecto al otro, que se siente indefenso frente a la agresión.
